Las declaraciones han sido profusas. Sólo que con declaraciones y condolencias Cuba no saldrá de su angustia. La oposición cubana necesita apoyo y solidaridad verdadera. Si los demócratas del mundo no asfixian a la disctadura castrista, la dictadura castrista terminará asfixiando al pueblo de Cuba. Después de qué servirían condolencias y declaraciones.
Por eso agradezco, pero alerto a Washington, Bruselas, Paris, España, Londres y organismos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch que condenaron este miércoles la muerte del disidente cubano Orlando Zapata Tamayo tras una larga huelga de hambre.
Estamos profundamente afectados por la muerte de Zapata, dijo Philip J. Crowley, subsecretario de Estado de Asuntos Públicos de Estados Unidos. Su muerte pone de relieve el injusto encarcelmiento de más de 200 prisioneros políticos en Cuba que deben ser liberados inmediatamente, sin demora.
La Comisión Europea lamenta profundamente la muerte del preso político Orlando Zapata y ofrece condolencias a su familia, dijo en Bruselas el portavoz de la Unión Europea, John Clancy, quien añadió que los derechos humanos siguen siendo una prioridad clave para Europa.
El gobierno de España deplora profundamente la muerte de Orlando Zapata, la muerte de un defensor de los derechos humanos en Cuba, dijo el vicepresidente tercero, Manuel Chaves. Hay un déficit de derechos humanos en este país.
El opositor Partido Popular español culpó al ejecutivo de Castro de la muerte del disidente y exigió al presidente José Luis Rodríguez Zapatero que reconsidere sus relaciones con La Habana
El Ministerio del Exterior británico expresó su preocupación por los abusos a los derechos humanos en la isla y exigió la liberación de todos los presos políticos.
En París, el vocero del ministerio del Exterior francés Bernard Valero hizo pública su consternación por la muerte de Zapata y precisó que el ejecutivo había reclamado su libertad.
Las condenas no llegaron exlusivamente desde los gobiernos. En Londres, Amnistía Internacional reclamó una investigación para determinar si las malas condiciones carcelarías habían sido un factor determinante en la muerte del disidente cubano.
El subdirector de Human Rights Watch, Daniel Wilkinson, calificó de tragedia la muerte de Zapata y pidió la liberación de todos los presos políticos en Cuba, quienes –dijo-- viven en condiciones horribles y no tienen ningún derecho ni ningún mecanismo para protegerse de los abusos del régimen. Solo Nuestra América ha callado. Ni una sola voz se ha alzado entre el Rio Bravo y la Patagonia para por lo menos dar las condolencias a Reina Luisa.
Triste panorama para esta desgraciada "nuestra América"...
ResponderEliminar¡¡Así nos va!!
De América Latina no puede esperarse nada. AL está bajo la bota de Chávez y de los Castro como si de ellos pudiera venir la redención. Simplemente, no hay vergüenza, todo se vuelve politiquería de bajo fondo. Unos no declaran porque tienen miedo de lo que pueda hacer el "hermano cubano" y otros por congraciarse con el régimen de La Habana. Sigue la tristeza, Manuel.
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